Descubren una misteriosa pirámide dedicada a una reina desconocida en Egipto

Descubren una enigmática pirámide dedicada a una reina desconocida en Egipto

En un emocionante hallazgo arqueológico, expertos de la Universidad de Ginebra, en colaboración con arqueólogos franceses y suizos, han descubierto una pequeña pirámide de granito rosado al sur de la región de Saqqara, a 30 kilómetros al sur de El Cairo. El Ministerio de Antigüedades de Egipto ha revelado que esta pirámide fue erigida en honor a una reina previamente desconocida llamada Neith, que pertenece al período del Imperio Nuevo.

Este descubrimiento ha despertado gran interés entre la comunidad arqueológica, ya que hasta ahora no se tenía ningún conocimiento sobre la existencia de la reina Neith. Los arqueólogos se encuentran inmersos en el análisis de los grabados ornamentales de la pirámide con el objetivo de obtener más información sobre su identidad y posición en la sociedad de la época. Aunque solo se pueden hacer especulaciones por el momento, se cree que Neith podría haber sido una regente o una mujer prominente de su tiempo.

Las pirámides de Egipto son reconocidas como impresionantes maravillas arquitectónicas que han perdurado a lo largo de milenios. Ubicadas en la orilla occidental del río Nilo, cerca de la ciudad de El Cairo, las pirámides sirvieron como tumbas para los faraones, los gobernantes de la antigua civilización egipcia. Entre las pirámides más famosas se encuentran las de Giza, incluyendo la Gran Pirámide de Guiza, la Pirámide de Kefrén y la Pirámide de Micerinos.

La Gran Pirámide de Guiza, también conocida como la Pirámide de Keops o Khufu, destaca como la más grande de las tres y es considerada una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo. Construida alrededor del año 2560 a.C., como la tumba del faraón Keops, esta majestuosa estructura se alzaba originalmente a una altura de aproximadamente 146 metros, siendo la construcción más alta realizada por el hombre durante casi 4.000 años.

La construcción de las pirámides requería una meticulosa planificación, organización y una gran cantidad de mano de obra. Se estima que decenas de miles de trabajadores, incluyendo obreros y campesinos, participaron en su edificación. Los bloques de piedra caliza, algunos de ellos de varias toneladas, fueron extraídos de canteras cercanas y transportados hasta el lugar de construcción. Luego, se tallaron y colocaron cuidadosamente para formar las imponentes estructuras piramidales.

El descubrimiento de la pirámide dedicada a la reina Neith añade una fascinante pieza al rompecabezas de la historia egipcia, abriendo nuevas perspectivas sobre la vida y el legado de figuras destacadas de la antigua realeza. Los arqueólogos continuarán explorando este enigma arqueológico, desentrañando los secretos que yacen bajo la arena del antiguo Egipto.